Nuevamente
la sociedad venezolana es colocada en 3 y 2, no me refiero precisamente al
término del Baseball 3 bolas y 2 strikes, no, me refiero a la designación de un
nuevo cuerpo de rectores del CNE, el cual es el órgano venezolano que
organiza los procesos electorales en el país y que desde tiempos del
chavismo tiene dos características; la primera es que es un Poder Público con
rango Constitucional y la segunda es la baja credibilidad que ha cosechado
a lo largo de 20 años, entre ventajismo al sector oficial, triquiñuelas y
cambios legales a favor del partido de gobierno.
En estos
momentos Venezuela es un país agónico y no solo nos referimos a las
altas cifras de muertos por el Covid19, que a todas estas, el régimen de Nicolás
Maduro oculta, pero todos sabemos que son altas, porque lo estamos viviendo a
carne propia. También está muriendo porque su economía sigue
decreciendo, la hiperinflación no tiene fin, por sus más de cinco millones de
migrantes y creciendo que siguen huyendo del país, a eso sumamos la
anarquía y corrupción de los cuerpos de seguridad del Estado, el mal
gobierno, la crisis en la salud, educación, servicios públicos entre otros
y en general, por todos los males que años de despilfarro, corrupción y
autoritarismo nos ha dejado el chavismo desde 1998 hasta hoy.
Hoy, se nos
presenta nuevamente nuestro dilema shakesperiano, de "ir o no ir a votar
en unas futuras elecciones" y créanme algo, no es nada sencilla
esta situación, en un país donde el organizador de las elecciones
está parcializado al gobierno y quien custodia las mismas, la Fuerza
Armada Nacional Bolivariana, cada día da más muestras de desprecio y odio a su propio
pueblo, no solo por su comportamiento desproporcionado durante los años de
protesta nacional, también por la forma como manejan diversos temas, como
lo son las seguridad de la Nación, la soberanía y el
enriquecimiento ilícito de muchos de los oficiales de los distintos
componentes o fuerzas, en especial los de más altos rangos.
Por otra parte
tenemos la división y rencillas entre los distintos actores y
partidos de oposición, en una especie de zoológico político, donde hay
políticos de medios y redes, pero sin votos, políticos corruptos serviles
al régimen, políticos radicales que se oponen a todo y la final no
proponen ninguna solución a la crisis, políticos con
buenas intenciones, pero solitarios en su cruzada, partidos tradicionales,
partidos de maletín y partidos de una sola figura que se cree tocada por
la providencia, no daré nombres para no herir sentimientos, pero estoy
seguros que todos han visto la película completa.
Si bien es
cierto que cuando la oposición ha ido unida a las elecciones, ha sido
cuesta arriba para el oficialismo y su CNE hacer las trampas habituales y se
han logrados importantes victorias, no es menos cierto que estábamos en
otros tiempos, que a pesar del autoritarismo, aun se guardaban las
formas en ciertos aspectos, pero la realidad de hoy en día es otra
para Venezuela. La DEPRAVACION con la que hoy se maneja el régimen es
incomparable con otros tiempos, un alto Mando Militar que públicamente a
través del Ministro de la Defensa el Gral. Padrino López, dice
ser profundamente "Revolucionaria, chavista y antimperialista", una
Vice Presidenta, Delcy Rodríguez, que en una ocasión se
refirió a una masacre de indígenas, textualmente a "Eso es para
que vean de que somos capaces" cuando estos protestaban por sus
pésimas condiciones de vida y los abusos de los militares de la zona, una
Iris Valera, que dijo que soltaría a los privados de libertad de las
cárceles venezolanas, para defender la revolución, un Diosdado Cabello,
que dice y hace lo que le da la real gana, además de una larga cadena de
abusos que no nos daría un informe de 10 mil páginas para resumirlo,
nos queda preguntarnos, si hacemos algo acudiendo a unas elecciones contra este
tipo de gente.
Queda mucho por
analizar respecto si ir o no a unas elecciones en Venezuela, ya que no
tenemos garantizado nada, más allá de lo que se escucha en la calle de
"Dictadura no sale con votos", no son muchas las opciones que
tenemos los venezolanos, ante una crisis tan grave como la que hoy vivimos, una
oposición dividida y una comunidad internacional que solo habla de
Venezuela en convecciones y medios de comunicación, pero que en la práctica
nos han dejado solos ante esta grave situación, que no ha terminado en
guerra civil, porque Dios es grande. En nuestra opinión, aun vemos un camino
muy oscuro en los senderos de la Nación y un futuro del mismo color,
mientras tanto Venezuela sigue agonizando.
Fred
López Pirela
POLITÓLOGO/ABOGADO