Los enemigos de la Santa Iglesia Católica,
en estos momentos deben estar babeando de ver tantos frentes por donde
atacarla, la renuncia del Santo Padre Benedicto XVI ha caído como un rayo en la
Santa Sede y ha dejado consternado a la feligresía, el mundo se pregunta: ¿que
ha sucedido? Es que desde hace casi 600 años ningún Papa abdicaba, algo
está sucediendo en el Vaticano.
El miércoles de Cenizas,
el Santo Padre oficiando lo que seria su última misa como Papa, Benedicto XVI, aclaró
que se encuentra bien de salud, dejando entrever que su renuncia, se debe a la
división de la Iglesia e intereses individuales dentro de la misma, la hipocresía
y las luchas internas han sido un catalizador de la decisión tomada.
Dios está por
encima de todo, hay que orar y luchar contra los males de la Iglesia, los
radicalismos ultra conservadores, los partidarios de la teología de la liberación,
la pederastia, la apostasía, los intereses políticos y en general la falta de
Fe, hay que acabarla y reforzar los valores que nuestro Señor Jesucristo nos
enseñó, la Santa Iglesia levantada por San Pedro en gracia de la Santísima
Providencia debe seguir sobre la roca firme en la que fue erigida, está es una
nueva cruzada en la que todos debemos luchar.
Dios iluminará el
camino de los Cardenales del mundo para tomar la mejor decisión en estos
tiempos turbios.
Foto Cortesía de Efe.